Cuando apuntas con el dedo, recueda que otros tres dedos te señalan a ti.
Cuando el carro se ha roto, muchos os dirán por donde no se debía pasar.
Cuando hables, procura que tus palabras sean mejores que el silencio.
Cuánto más grande la cabeza, más fuerte la jaqueca.
Disfruta hoy. Es más tarde de lo que crees.
Duerme con el recuerdo de la muerte y levántate con el pensamiento de que la vida es corta.
El sabio convive con la gente sin criticar, el necio critica sin convivir.
Fingir puede convertirse en realidad.
La mujer llora antes del matrimonio, el hombre después.
La preocupación, con frecuencia, proyecta una enorme sombra de algo muy pequeño.
La sabiduría inútil sólo se diferencia de la tontería en que da mucho más trabajo.
Las grandes obras las sueñan los genios locos. Las ejecutan los luchadores natos. Las disfrutan los felices cuerdos. Las critican los inútiles crónicos.
Cuando el carro se ha roto, muchos os dirán por donde no se debía pasar.
Cuando hables, procura que tus palabras sean mejores que el silencio.
Cuánto más grande la cabeza, más fuerte la jaqueca.
Disfruta hoy. Es más tarde de lo que crees.
Duerme con el recuerdo de la muerte y levántate con el pensamiento de que la vida es corta.
El sabio convive con la gente sin criticar, el necio critica sin convivir.
Fingir puede convertirse en realidad.
La mujer llora antes del matrimonio, el hombre después.
La preocupación, con frecuencia, proyecta una enorme sombra de algo muy pequeño.
La sabiduría inútil sólo se diferencia de la tontería en que da mucho más trabajo.
Las grandes obras las sueñan los genios locos. Las ejecutan los luchadores natos. Las disfrutan los felices cuerdos. Las critican los inútiles crónicos.
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